Una derrota y un empate, precedentes en El Molinón en la máxima categoría
La historia es bastante reciente. Todo aconteció en el último lustro. El feudo de El Molinón ha acogido, a lo largo del registro histórico, sendas confrontaciones en el universo de la máxima categoría. El serial de los duelos forma parte de la memoria de los cursos 2010-2011 y 2011-2012. En noviembre de 2011 las huestes que conducía desde el interior del banquillo Luis García se posicionaron en el coliseo astur. Felipe Caicedo inauguró el marcador en el tramo definitivo. Eguren rescató un punto cuando el partido entraba en su ocaso. El encuentro se repitió en el ejercicio siguiente en el mismo marco competitivo.
Los adversarios alcanzaron una cita, programada para los primeros días del mes de abril, desde situaciones totalmente antagónicas en la clasificación general. El Levante de Juan Ignacio se propulsaba en dirección hacia la Vieja Europa mientras que el propietario de El Molinón mantenía una atribulada lucha por la permanencia. El encuentro era de alto voltaje. Los puntos, y la suma en cada uno de los expedientes de los oponentes, contenían un incalculable valor. Valdo y Kone adelantaron a la escuadra azulgrana hasta en dos ocasiones. El choque parecía solucionado.
El Sporting se agrietaba, pero el Levante olvidó cerrar el enfrentamiento. La entidad rojiblanca tiró de raza en los últimos minutos, espoleados por el ímpetu trasladado al campo por la grada del estadio centenario, para alcanzar la victoria. Trejo, Lora y Sangoy anotaron los tantos locales. El duelo, entre la representación granota y asturiana, se ha repetido en la categoría de Plata. El choque nació en los años finales de la década de los cuarenta y cuenta con muescas en el formato de la Copa del Rey. En total resulta posible contabilizar veinticuatro confrontaciones, en tierras asturianas y valencianas, que se han resuelto con nueve triunfos del Sporting, cinco igualadas y diez triunfos del Levante.
