
El Levante UD informa que va a poner todos los mecanismos a su alcance para evitar cualquier posible mal uso de las entradas de invitación de las que van a disfrutar los abonados por la promoción del partido de vuelta del playoff ante el Albacete Balompié, que se jugará el miércoles día 7 a las 21:00 horas en el estadio...
Cambio de costumbres (2-1)
enfado.
La victoria del Levante UD ante el Sporting despeja unas cuantas dudas tras tras un breve período incierto y reabre de pleno el camino de la esperanza. El conjunto azulgrana continúa sufriendo más de la cuenta, pero ahora gana, lo que es una buena nueva para la sufrida gente granota, que vive incrédula la situación de su equipo en lo alto de la clasificación a un paso de superar el primer cuarto del campeonato.
Las diferencias entre el Levante UD 2002/03 y la mayoría de los anteriores se destaparon definitivamente ante el Sporting, conjunto que a pesar de su crítica situación en la tabla mostró el orden y la firmeza propia de quien lucha por algo más que la supervivencia. Al Levante UD le bastó un par de acciones aisladas para decantar el partido de su lado, mientras el rival había sumado méritos suficientes para llevarse al menos el empate.
No le quedó más remedio al Levante UD en la primera parte que obcecarse en la búsqueda de Amato, vistas las pocas concesiones que le hizo el rival en su campo. Todo porque Maceda, entrenador del Sporting, aplicó todo lo que había apuntado en su libreta en los últimos días: que al Levante UD no hay que dejarle pensar a partir de la raya del medio campo. Efectivamente, el Sporting tapó desde el principio las vías por donde el Levante UD enciende su traca: las bandas. Ni Jofre ni Ettien encontraban ayer camino hacia el área. El resto del potencial ofensivo, que son Mijatovic y Amato, tampoco lo tuvo nada fácil ante el orden defensivo impuesto por el Sporting, muy aplicado a la hora de anular el peligro antes de que aparezca.
Así que la primera media hora transcurrió más con la pelota rondando la portería de Rafa que la visitante. No había manera salvo que alguien sacara el talento y ése fue Jofre. En la primera jugada en la que el Levante UD movió la pelota con criterio en campo contrario se fraguó el esperado gol. Jofre recibió la pelota de Cristian Díaz fuera del área, recortó con la izquierda a un defensa y envió el balón a la escuadra contraria. Era justo lo que había intentado evitar el Sporting en todo momento y le ocurrió cuando menos lo esperaba. El gol no cambió el guión del partido, salvo que la gente pensaría que con la entrada de Congo por Mijatovic -se retiró lesionado nada más marcar su equipo- no le iba a venir nada mal al Levante UD a la hora de llegar con más prisa al área rival.
Con el partido plenamente equilibrado, la segunda parte dio paso a más de lo mismo. El Sporting no debilitó su esquema cuando se fue en busca del empate y ahí se equivocó el Levante UD, que sospechó que el partido era propicio para el contragolpe. En medio de la duda, llegó el empate del Sporting a la salida de un córner. Vuelta a empezar. Y a sufrir, como siempre.
No respondió el Levante UD al golpe hasta los últimos 15 minutos, cuando Cantarero decidió poner sobre el tapete todo el talento que guardaba en el banquillo. Gente como Rivera o Limones, por ejemplo, capaces de desatascar el tráfico que había en el campo. Hasta ese momento, todo ese trabajo había recaído sobre Carpintero y Jofre, y éste último estaba ya con las batería descargada. Lo demás eran pases desacertados y carreras estériles de Congo. Con el partido tocando a su fin, Limones aprovechó un saque largo de banda para llevar el balón a la portería. Con los negros precedentes escritos en el Ciudad de Valencia en situaciones parecidas, aquello fue un enorme guiño a la grada, que ve como su equipo sigue trepando y, para mayor alegría, comprueba que la cantera no es un pozo. Es una mina.