
No. Robert Zemeckis no amenaza con desempolvar un guion olvidado en las profundidades del desván para añadir una nueva entrega a la saga de Regreso al Futuro con Morales como principal protagonista. No. La propuesta planteada tampoco parte de una fantasía irrealizable que cambie el formato de las horas del reloj que marca el devenir del paso del tiempo. Si....
Morales; la multiplicación de los panes y los peces
Su ascendente en el enfrentamiento del pasado viernes en el Ciutat fue cuantificable. El Getafe sufrió en sus carnes el efecto Morales y toda la carga emocional que el atacante madrileño incluye en su libro de estilo como futbolista. La estadística se encarga de refrendar cada punto de esta tesis. El Comandante anotó una diana que sirvió para aclarar el partido en su amanecer y ponerlo en franquicia, un aspecto trascendente para el bloque de Rubi, inventó la acción que concluyó con Rossi ejecutando a Guaita desde los once metros y quizás, como broche a una noche realmente tan titánica como majestuosa, asistió para asociarse con Verdú en el prólogo del estreno anotador del delantero catalán con la elástica azulgrana. El gol cerró un duelo que devuelve al Levante a la primera línea de fuego en la cruenta batalla por la supervivencia en Primera División. Morales, y es una evidencia a tenor de los datos presentados, capitalizó la cita ante la escuadra del Sur de Madrid. De norte a sur y de este a oeste. Su presencia fue continuada. Parece una norma en las últimas semanas desde decidió dar un paso al frente para reclamar galones y protagonismo tras alistarse al desafío que determina la permanencia. La grada honró el encuentro dibujado con una sonora y estremecedora ovación mientras el futbolista tomaba el camino hacia el banquillo granota.
El encuentro moría y la victoria era innegociable. Si se trata de resaltar indicios que confirmen el influjo del jugador en el ecosistema azulgrana resulta posible escrutar más datos reveladores de esta tendencia. Morales rubricó ante la meta del Getafe su sexto gol en la presente temporada tras materializar 1734 minutos del relato de la competición. La cifra no parece aleatoria cuando restan trece confrontaciones todavía para el cierre final del ejercicio. Cualquier comparativa con el pasado permite dimensionar el presente Y no es un simple juego de palabras. Su debut en el marco de la Liga BBVA, temporada 2014-2015, lo finiquitó con la conquista de tres goles. En la memoria perdura la imagen de la diana frente al Valencia en el Ciutat tras clavar el balón, y de manera literal, en la escuadra de la portería de Alves después de una furibunda y corajuda carrera en la que fue dejando atrás a tantos defensores como fueron surgiendo a su paso.
Si se echa la vista atrás en el tiempo puede consignarse un número de goles parejo en la experiencia que desarrolló en las filas del Eibar en un ejercicio rubricado con un histórico ascenso a la máxima categoría. Morales estampó su firma en tres ocasiones en el umbral de la división de Plata. La causa-efecto es innegable. No hay que hacer un tratado para dictaminar que mejora sus prestaciones notablemente y que en el trayecto liguero en recorrido iguala la marca anotadora impresa en las dos temporadas anteriores en el universo de la Liga de Fútbol Profesional. El hecho permite acentuar su importancia en el bloque de Rubi desde un prisma cualitativo y cuantitativo. Morales ha asumido la gestión del gol en los postreros tiempos. Como sucede en el relato bíblico lo multiplica. Quizás no hablé en exceso, pero tiene carácter dentro de la cancha. A la verticalidad y osadía que muestra con el cuero pegado a sus pies ha añadido la acción del gol. En este caso, la velocidad que imprime cabalgando por la banda conjuga con la cualificación en la definición. Hay un punto de insubordinación y de locura que racionaliza con el gol. Los dígitos resaltan que es el segundo jugador con más clarividencia en ataque del plantel azulgrana acompañado por Deyverson. Los dos jugadores lideran la clasificación de los artilleros levantinistas del curso.